Albert Attenelle mostró un talento precoz que le llevó a debutar con sólo seis años en Barcelona. Entre el público, estaba el gran pedagogo Frank Marshall, que se convirtió en su mentor transmitiéndole el legado de la escuela pianística catalana, desde Malats, Viñes y Albéniz hasta Granados pasando por el propio Marshall.
Formato posteriormente en París con Marcel Ciampi, se presentó como solista con las orquestas de Barcelona y Bilbao en 1957, y obtuvo varios premios en concursos, como el Reine Elisabeth de Bruselas y el Vianna da Motta de Bilbao, que impulsaron una fructífera carrera como solista e intérprete de música de cámara en Europa, América, Oriente Medio y Japón.
Su repertorio abarca todos los estilos, aunque siempre ha mantenido una especial atención por los compositores del siglo XX. Muestra de ello es son las audiciones de la Música callada de Mompou o que interpretó repetidamente los conciertos para piano y orquesta de Luis de Pablo, Robert Gerhard y Xavier Montsalvatge, entre otros. Su larga dedicación a la música de cámara le ha permitido interpretar con tríos, cuartetos y quintetos con piano de Mozart, Beethoven, Ravel, Shostakóvich, Messiaen, Guinjoan, Casablancas, Brotons, Granados o Turina.
Ha publicado una edición Urtext de la suite Iberia de Albéniz y en 2005 le fue otorgada la Medalla Isaac Albéniz en reconocimiento a la contribución y difusión de la obra de este compositor. Sus recientes grabaciones de Albéniz, Granados y Frederic Mompou han sido aclamados por la crítica especializada.
Es profesor del Conservatori Liceu desde el año 2006 y cabe destacar su presencia en jurados de varios concursos nacionales e internacionales así como sus actividades docentes en Cursos de Interpretación.